lunes, octubre 24, 2005

Desiderata de la felicidad

Escrita en 1927 por Max Ehrmann.

Anda plácidamente entre el ruido y la prisa, y recuerda la paz que se puede encontrar en el silencio.
En cuanto te sea posible, Vive en buenos términos con todas las personas, enuncia claramente tu verdad; escucha a los demás, incluso al torpe e ignorante; ellos también tienen su historia.
Evita las personas ruidosas y agresivas, pues son un fastidio para el alma, Si te comparas con los demás, te volverás vano y amargado; porque siempre habrá personas más grandes y más pequeñas que tú.
Disfruta de tus logros así como de tus planes. Mantén el interés en tu propia carrera, por humilde que sea; ella es un tesoro en el fortuito cambiar de los tiempos, se cauto en tus negocios; pues el mundo está lleno de egoísmos, Pero no te cierres a la virtud que hay en ella; mucha gente se esfuerza por alcanzar nobles ideales; y en todas partes la vida está llena de heroísmo, se tú mismo. En Especial, no finjas el afectos. Tampoco seas cínico en el amor; porque medio de todas las aridez y desengaños, es perenne como la hierba.
Acata dócilmente el consejo de los años, abandonando con donaires las cosas de juventud.
Cultiva la fuerza del espíritu para que te proteja en la adversidad repentina. Pero no te angusties con fantasmas. Muchos temores nacen de la fatiga y la soledad. Junto con una sana disciplina, se benigno contigo mismo.Tú eres una criatura del universo, no menos que los plantas y las estrellas; y tienes derecho a existir, y sea que te resulte claro o no, el universo marcha como debiera. Por lo tanto, manténte en paz con Dios, cualquiera sea tu modo de concebirlo y cualesquiera sean tus trabajos y aspiraciones, mantén la paz con tu alma en la bulliciosa confusión del planeta, que con todas sus farsas y sueños fallidos, sigue siendo hermoso. Ten cuidado. Esfuérzate por ser feliz.

Max Ehrmann Alemán, nació en una familia acomodada, en los Estados Unidos de Norte América.
Estudio Inglés en la Universidad De Pauw, y Filosofía en Harvard.
Se dedicó a la Abogacía en su ciudad natal: Terre Haute, Indiana.
A la edad de 41 años se jubiló, para dedicarse a la escritura de ensayos y poemas.
Murió en el año de 1945.

Referencia: Eugenio Castillo B. (gracias flaco por la corrección)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

inspiradoras las palabras, y claramente utilizables como modelo de vida, si de verdad todos actuáramos bajo esa primisa, viviríamos en un mundo muy distinto.
Esta frase la ecuentro poderosa: "Evita las personas ruidosas y agresivas, pues son un fastidio para el alma, Si te comparas con los demás, te volverás vano y amargado; porque siempre habrá personas más grandes y más pequeñas que tú." Todos caemos en esto, en compararnos, en tratar de encajar en un grupo determinado y nos olvidamos realmente de queines somos, nos olvidamos de lo escencial...
bonitas palabras del poema.. un lujo para leerlo más de una vez

Fren dijo...

Bueno para que sepas, fue mi papá quien me lo enseño!.... el flaco siempre se ha manejado muy bien!